Muérdeme brutalmente cual sagaz serpiente
injerta en mi cuerpo tu veneno lentamente
déjame perderme sin retorno en las fauces
de tu sabio pero amargo mar que me retiene.
Sedúceme con los ojos de tu piel que calla
observa mi decadente corazón en llamas
toca ahora mi ser con tus manos ásperas
infiltra tu recuerdo en cada rincón de mi alma.
En mi interior explota toda una colisión
mi piel está de gala, vestida con tu olor
te infiltraste en mi vida como una adicción
y ahora te marchas retrato de mi pasión.
Saco una llave y toco la puerta equivocada,
mi desnudez se embriaga con tu piel castaña
mi cuerpo que te extraña se posa en tu cama
los invitados inesperados en la sala aguardan.
Mis lágrimas furtivas se deslizan en el piso,
toco un álbum vacío con mi nombre escrito
con placas que me invitan sonreír a tu delirio,
me vicio con tu aroma que ahora he perdido.
Quiero besar esos labios nunca antes besados,
rozar con las navajas tus desnudas manos,
conocer tus secretos, concertar un encuentro,
quiero hacerle el amor a tu impávido cuerpo.
En tu honor me desnudo, debo ser valiente
necesito sumergirme en tu perdida mente,
quiero retratar mi nueva libertad de frente
y los desnudos posados sobre el pasto verde.
Quiero tomarte una foto a su tiempo,
una foto que devele un misterio
- hola, ¿me cuentas un secreto?
- si tú me dices a mí uno primero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario