Una lágrima que cuente
las historias que en tu mente
no vivirán para ser contadas más.
Una lágrima que roza
mis mejillas que están solas,
una carta que te explique,
un delirio no entendido.
Una disculpa que late,
cual corazón mal herido,
una amistad que se pierde
en dulce crueldad latente.
No hay palabras que contar
el espejo ha dicho todas,
no hay retorno a abordar,
hoy será un día a olvidar.